HQ300

Desarrollado para su uso en gasóleos de automoción.
Se incorpora en brazo de carga. Este aditivo confiere a los gasóleos, cuando éstos son conformes a las especificaciones, un rendimiento en los ensayos en laboratorio y banco de motores que, según los resultados obtenidos en los ensayos de evaluación realizados en el Laboratorio de CLH y en otros centros colaboradores, iguala o supera las exigencias en esta materia de los principales organismos y asociaciones profesionales.

Sus propiedades se pueden resumir en:
La mejora en la calidad de ignición, la limpieza de inyectores, la ausencia de corrosión y la buena conservación de las bombas de inyección, inducen efectos positivos en la economía del carburante, en la reducción de ruido y de contaminantes, en la facilidad de arranque, en el arranque en frío y en la suavidad de conducción.

En los ensayos realizados no se han detectado efectos secundarios que afecten a la calidad del gasóleo.

HQ400

Es un aditivo multifuncional, desarrollado para su uso en gasolinas de automoción.

Se incorpora en brazo de carga. Este aditivo confiere a las gasolinas, cuando éstas son conformes a las especificaciones, un rendimiento en los ensayos en banco que, según los resultados obtenidos en los ensayos de evaluación realizados, iguala o supera las exigencias en esta materia de los principales organismos y asociaciones profesionales.

Sus propiedades se pueden resumir en:
Impide la formación de depósitos en las válvulas de admisión (máxima acumulación de depósitos- promedio de las cuatro válvulas: 30 mg/válvula en los ensayos M-102E,

CEC F-05-A-93 y M-111, CEC F-20-A-98). Este nivel de limpieza se consigue tanto en gasolinas exentas de etanol como en las que lo contienen en proporción de hasta el 10% V/V

Mantiene limpios los inyectores tanto en inyección directa como indirecta.

La mejora en la limpieza de los sistemas de admisión de los motores induce efectos positivos en la economía del carburante, en la reducción de contaminantes, en la facilidad de arranque y en la suavidad de conducción.

AdBlue

Todos los motores por su funcionamiento producen un gas nocivo para la salud llamado óxido de nitrógeno (Nox). Los niveles de óxido de nitrógeno en los gases de escape están limitados por la normativa Euro 6, que entró en funcionamiento el 1 de noviembre de 2015.

Debido a esta regulación los fabricantes comenzaron a utilizar el denominado Adblue aplicando la tecnología SCR (sistema de reducción catalítica).

Es un aditivo químico que convierte el óxido de nitrógeno en sustancias inocuas para el ser humano y el medio ambiente. Consiste en una mezcla al 32,5% de urea y agua.

¿Cómo funciona el Adblue?

El proceso de rellenado del aditivo es sencillo. El Adblue se inyecta dentro del motor por el conducto de escape, una vez que los gases de escape han salido del motor. Esto produce una reacción con el agua existente en la disolución para convertirse en amoniaco.

Este amoniaco entra después en un catalizador de Nox donde reacciona con los óxidos de nitrógeno, para transformarse en nitrógeno y vapor de agua al salir por el escape.

Cuando queden menos de 2.000 km de autonomía del aditivo, una alerta nos recuerda tras cada arranque la autonomía restante. Cuando es inferior a 1.000 km, la alerta queda fija en el cuadro de mandos.

Si se consume el aditivo en un trayecto, no pasa nada, podremos llegar al taller, pero en cuanto apaguemos el motor el sistema prohíbe que lo volvamos a poner en marcha si no se resetea la unidad y se repone la urea.

Lavado a presión

Aspirado

Autolavado